La supermodelo cumple años el 20 de julio.
Una de las caras más memorables de Hollywood, Marilyn Monroe se dio a conocer a principios de los años 50 con "Niagara" (1953) y alcanzó el estrellato con "Some Like It Hot" (1959), la película que le valió un Globo de Oro.
Grace Kelly apareció en 11 películas en la década de los 50, incluida "The Country Girl" (1954), con la que ganó un Óscar. En abril de 1956 se casó con el príncipe Raniero III, convirtiéndose en princesa de Mónaco.
La actriz francesa Brigitte Bardot se llevó una ovación internacional por su papel en "And God Created Woman" (1956). Su increíble belleza y sensualidad hicieron que muchos la considerasen un símbolo sexual.
La actriz, bailarina y cantante estadounidense de origen puertorriqueño Rita Moreno es famosa por haber protagonizado "West Side Story" en 1961. Sin embargo, ya había participado en otras películas de renombre como "Singin' in the Rain" (1952) y "The King and I" (1956). Moreno es una de las pocas intérpretes en haber logrado lo que se conoce como la "triple corona de la actuación", es decir, un Óscar, un Emmy y un Tony.
Audrey Hepburn saltó al estrellato con la comedia romántica "Roman Holiday" (1953), en la que salía con Gregory Peck. Su papel en la película le valió un Óscar, un Globo de Oro y un BAFTA.
Dorothy Dandridge hizo historia al convertirse en la primera actriz afroamericana en estar nominada a un Óscar a mejor actriz por "Carmen Jones" (1954).
Kim Novak participó en algunos de los títulos más taquilleros de la década de los 50, como "Pal Joey" (1957) y "Vertigo" (1958).
La trayectoria cinematográfica de Elizabeth Taylor despegó en los 50 con "Father of the Bride" y a partir de ahí fue cosechando un éxito tras otro. La actriz también apareció en "Giant" (1956), "Raintree County" (1957) y "Cat on a Hot Tin Roof" (1958). Esta última película le valió dos nominaciones al Óscar a mejor actriz.
Natalie Wood era una adolescente cuando la nominaron al Óscar a mejor actriz de reparto por su papel en "Rebel Without a Cause" (1955), a la que siguió "The Searchers" (1956). En 1981, Wood moría ahogada en la isla Santa Catalina en circunstancias que aún están por esclarecer.
Shirley MacLaine debutó con la comedia de Alfred Hitchcock "The Trouble with Harry" (1955) y nunca ha dejado de actuar.
En los 50, la intérprete sueca Ingrid Bergman ya era más que conocida en Hollywood. Su papel en "Anastasia" (1956) le valió un Óscar a mejor actriz.
En los 40, Lauren Bacall participó en varios títulos memorables con su marido Humphrey Bogart. En la siguiente década trabajó en películas tan taquilleras como "How to Marry a Millionaire" (1953) y "Designing Women" (1957).
Rita Hayworth pasó un poco desapercibida a mediados de los 50 después de haberse tomado un descanso de 4 años al principio de la década. Sin embargo, volvió a brillar con luz propia en 1957 tras aparecer en "Pal Joey". Al año siguiente también participó en la exitosa "Separate Tables".
Jane Russell apareció con Marilyn Monroe en "Gentlemen Prefer Blondes" (1953), su mayor papel desde "The Outlaw" (1943). En la década de los 50 participó en varias películas, incluida "The Tall Men" (1955), donde trabajó con Clark Gable.
La actriz y cantante Debbie Reynolds fue una de las intérpretes de mayor renombre de su época. Debutó con "Singin' in the Rain" (1952) y su canción "Tammy" de "Tammy and the Bachelor" (1957) llegó al puesto número uno de la lista Billboard.
Ava Gardner fue uno de los grandes nombres de Hollywood. En los 50 participó en numerosas películas entre las que se incluyen "Show Boat" (1951), "Mogambo" (1953) y "Bhowani Junction" (1956). Muchas de sus actuaciones le valieron varias nominaciones a los Óscar.
¡No podemos hablar del Hollywood de los 50 y olvidarnos a Jayne Mansfield! La actriz participó en numerosas películas de éxito, pero también se la recuerda por su vida personal y sus trucos publicitarios. Su muerte en un accidente de tráfico conmocionó a la industria cinematográfica.
Doris Day, uno de los rostros más omnipresentes del cine de los 50 y 60, protagonizó "Calamity Jane" (1953) y participó en la película de Hitchcock "The Man Who Knew Too Much" (1956) junto a James Stewart. Se la recuerda sobre todo por sus proyectos con Rock Hudson, especialmente por "Pillow Talk" (1959), que le valió un Óscar a mejor actriz.
Nacida en 1927, la actriz italiana Gina Lollobrigida fue y sigue siendo una de las intérpretes más reconocibles de la era dorada de Hollywood. Entre sus muchas películas se encuentra "Bread, Love and Dreams" (1953), la cual le valió un BAFTA a mejor actriz extranjera.
La actriz inglesa Joan Collins tuvo papeles secundarios en una serie de películas británicas de principios de los años 50 antes de ser elegida por el director estadounidense Howard Hawks para interpretar a la intrigante princesa Nellifer en su primera producción internacional, "Land of the Pharaohs" (1954), rodada en Egipto. Al año siguiente debutó en Hollywood con "The Virgin Queen". Muchos años después, Collins alcanzó un extraordinario éxito en televisión interpretando a Alexis Colby en la serie "Dynasty" (1981-89), que se convirtió en un fenómeno mundial.
Deborah Kerr, nacida en Escocia, ganó el Globo de Oro por su papel como Anna Leonowens en el musical "The King and I" (1956), una oportunidad que marcó su trayectoria en los 50.
El debut cinematográfico de Eva Marie Saint llegó de la mano de "On the Waterfront" (1954). Su papel en la película le valió un Óscar a mejor actriz de reparto e hizo que le lloviesen los contratos, entre ellos uno para interpretar a Eve Kendall en el thriller de Hitchcock "North by Northwest" (1959).
La ya fallecida exmodelo Susan Hayward triunfó como actriz a finales de los 40 y durante toda la década de los 50. En 1952 estuvo nominada por tercera vez al Óscar a mejor actriz por interpretar a Jane Froman en "With a Song in My Heart" (1952). En 1959 se lo llevó por su participación en "I Want to Live!" (1958).
Jennifer Jones saltó al estrellato en la década de los 40, pero fue su trabajo durante los 50 lo que le otorgó su quinta nominación al Óscar por su papel en "Love is a Many-Splendored Thing" (1955). Tiempo después se convirtió en una gran defensora de la educación y la salud mental.
Entre las películas de los 50 de Debra Paget se encuentran "The Ten Commandments" (1956) y el debut cinematográfico de Elvis Presley "Love Me Tender" (1956).
Jean Simmons ya era una actriz de renombre en el Reino Unido antes de llegar a Hollywood en 1950. "The Robe" (1953), "Guy and Dolls" (1955) y "The Big Country" (1958) son algunas de las producciones en las que participó durante esa década.
La actriz inglesa Sylvia Syms cosechó varios éxitos a finales de los 50, apareciendo en algunas de las producciones británicas más famosas de la época como "Woman in a Dressing Gown" (1957), "Ice Cold in Alex" (1958) y "No Trees in the Street" (1959), conocida por ofrecer un retrato realista de la vida en los suburbios londinenses.
La actriz inglesa Claire Bloom debutó sobre los escenarios de Londres en 1947 y solo grabó una película en Inglaterra antes de que Charlie Chaplin la descubriese y le ofreciese coprotagonizar "Limelight" (1952). La película fue todo un éxito y se pasó el resto de los 50 trabajando con grandes nombres de la industria como James Mason, Laurence Olivier, Richard Burton y Yul Brynner.
Machiko Kyō fue una de las estrellas cinematográficas más famosas de Japón y estuvo especialmente activa durante los 50. Llamó la atención de Hollywood tras interpretar a Lotus Bloom, una joven geisha, en "The Teahouse of the August Moon" (1956) junto a Marlon Brandon y Glenn Ford. Fue su único papel en una película de habla no japonesa y le valió una nominación al Globo de Oro.
Fuentes: (Awards & Winners) (America Comes Alive) (History)
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