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En 2003 asistimos a la llegada de un objeto innovador y revolucionario: el vapeador. Este producto ofrecía una alternativa más segura al tabaco, además de una solución para dejar de fumar. Sin embargo, estos aparatos se pusieron de moda y muchos adolescentes y jóvenes que jamás habían fumado comenzaron a utilizarlos.

A pesar de su fama de producto seguro, 18 estadounidenses han muerto por enfermedades relacionadas con el uso del vapeador, a lo que hay que sumar otros 1.000 casos registrados. ¿Es hora de cuestionar la salubridad de este nuevo hábito? Haz clic para descubrirlo.

▲Los vapeadores nacieron como una alternativa saludable a los cigarrillos tradicionales.

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La publicidad afirmaba que los fumadores podrían disfrutar de su hábito sin tener que sufrir las consecuencias de exponerse a los químicos nocivos del tabaco tradicional. Sin embargo, también se convirtieron en la puerta de entrada de toda una generación a la nicotina.

▲Vapear se convirtió en una moda apoyada por los gigantes del marketing. Como no era "tan perjudicial como los cigarrillos", los adolescentes comenzaron a usar en masa el nuevo producto.

▲El Departamento de Salud Pública de Wisconsin (Estados Unidos) informó en agosto de 2019 de 11 casos de adolescentes y adultos jóvenes que fueron hospitalizados tras vapear durante un tiempo.

▲Sin embargo, el número de adolescentes hospitalizados ha crecido recientemente, según informa el Departamento de Salud Pública de Illinois.

▲La compañía de vapeadores Juul ha sido muy criticada por dirigir sus anuncios al público adolescente. El senado estadounidense ha comenzado una investigación.

▲Dos estudiantes de secundaria testificaron que un representante de Juul visitó la escuela para promocionar sus productos, etiquetados como "completamente seguros".

▲Juul Labs aseguró que jamás tuvo la intención de dirigir el uso de este producto hacia los adolescentes y que "combatir el vapeo entre los menores" es una de sus máximas prioridades.

▲A pesar de que las compañías de cigarrillos electrónicos afirman que sus productos no son tan peligrosos como el tabaco tradicional, hay estudios que aseguran que el uso a largo plazo de los vapeadores es bastante nocivo.

▲Puede que pasen décadas hasta que los estudios puedan determinar cómo de nocivos son estos productos y por qué.

▲Al vapear sostenemos un vaporizador que permite que absorbamos un líquido que tal vez (o tal vez no) tenga nicotina. En teoría, es una alternativa más saludable al tabaco, pero hay varios riesgos. Pasamos a evaluarlos en las siguientes fotografías.

▲Vapear está relacionado con ataques epilépticos o de otro tipo relacionados con la nicotina. Algunos cigarrillos electrónicos pueden liberar cantidades enormes de este componente, lo que hace que abusar del vapeador conlleve un gran riesgo.

▲La nicotina de los cigarrillos electrónicos hace que nuestro ritmo cardíaco se eleve, así como la presión sanguínea y los niveles de adrenalina.

▲Vapear no solo conlleva un riesgo por su elevado contenido en nicotina: la versión libre de nicotina también conlleva una exposición a partículas bastante tóxicas.

▲Varios estudios han demostrado que al vapear absorbemos partículas contaminantes.

▲El acetaldehído, el formaldehído y la acroleína son otros de los químicos tóxicos y nocivos que nos encontramos en los cigarrillos electrónicos.

▲El proceso de combustión de los cigarrillos tradicionales puede ser muy dañino para nuestros pulmones, pero el vapor de los vapeadores también representa una seria amenaza.

▲Vapear causa un sonido parecido a un silbido en los pulmones, debido a que las vías aéreas se estrechan.

▲Vapear puede aumentar el riesgo de desarrollar una enfermedad crónica obstructora del pulmón, según varios estudios realizados en ratones.

▲Un adolescente sufrió varias heridas en la cara cuando su cigarrillo electrónico explotó.

▲La Agencia Estadounidense de Comida y Medicamentos lanzó varios consejos para evitar que los cigarrillos electrónicos exploten.

▲Se estima que unos 2.035 cigarrillos electrónicos explotaron y causaron heridas a sus usuarios en los Estados Unidos entre el 2015 y el 2017.

▲Un estudio realizado de forma aleatoria y publicado por el New England Journal of Medicines demostró que el vapeo era más efectivo que la terapia de reemplazo de nicotina a la hora de dejar de fumar.

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En países como Reino Unido, el gobierno sugiere el uso de vapeadores para ayudar a dejar de fumar.

Vapear puede ayudarnos a dejar de fumar, pero también induce a usuarios nuevos a la nicotina.

▲El estatus legal de los vapeadores varía de un país a otro. Estos productos son ilegales en países como Japón o partes de la India. Ciudades como San Francisco también los han prohibido.