Analiza tu subconsciente
Enfría en vino sin diluirlo echando unas uvas congeladas en la copa. ¡Fácil, útil y elegante!
Usa un molde para magdalenas para mantener organizado el material de oficina de menor tamaño como los clips, las gomas y las chinchetas. De esa manera lo tendrás todo a mano y a la vista.
Evita que el hilo se enrede con este dispensador casero. Para prepararlo tan solo necesitas hacer un agujero en la botella, colocar dentro la madeja e ir sacando el hilo por el orificio. De esa forma el material se mantendrá limpio y no se te enredará cuando tejas o hagas ganchillo.
Elimina los olores desagradables de los zapatos colocando una bolsita de té seca en cada uno de ellos. Déjalas actuar por la noche para que absorban los olores y la humedad. Es una forma muy fácil, natural y barata de desodorizarlos.
Aumenta el espacio de almacenamiento de tu armario reaprovechando los abridores de las latas. Todo lo que tienes que hacer es colocarlos en los ganchos para así poder colgar otras perchas de ellos.
Si las gafas de sol se te caen constantemente, ata las patillas con una goma de pelo para que sean más cómodas de llevar.
Guarda los delicados adornos navideños en una huevera. De esa forma estarán protegidos y ordenados hasta que sea momento de volver a sacarlos el año que viene.
Limpia y desodoriza las alfombras con bicarbonato. Todo lo que tienes que hacer es espolvorearlo por encima, dejarlo actuar durante unos minutos y aspirarlo. Esto es especialmente útil para quienes tienen mascotas en casa o viven con varias personas.
Organiza las comidas de la semana con una tabla sujetapapeles. Cuélgala de la pared o del frigorífico para tenerla siempre visible. Es una forma sencilla pero eficaz de planear las comidas y así reducir el estrés que supone prepararlas.
Crea un embudo improvisado con papel de aluminio. Todo lo que necesitas es darle la forma necesaria y asegurarte de que se ajuste bien al recipiente para que el líquido no se salga. Es una solución fácil y económica si estás en un apuro o no tienes ningún embudo como tal a mano.
Elimina la electricidad estática de la ropa o del pelo pasando una toallita para secadora por encima. Una solución fácil, rápida y útil tanto para la colada como para retoques puntuales.
Desempolva la pantalla de la computadora y la televisión con un filtro para café. Su textura ayuda a limpiar el polvo sin rayar las superficies. De esa forma le darás un segundo uso a los filtros y podrás disfrutar de unas pantallas impolutas.
Mantén la ropa limpia cuando viajes cubriendo los zapatos con gorros de ducha. De esa forma evitarás que las suelas toquen lo demás y te será más fácil organizarlo todo.
Corta un limón en rodajas y tritúralas con un poco de agua. La acidez de esta fruta ayuda a limpiar las cuchillas y su frescor deja un aroma limpio y agradable. ¡Una solución rápida y natural!
Preserva las hierbas frescas y mejora la calidad de tus platos con este truco tan útil. Corta las especias, colócalas en una cubitera y cubre cada compartimento con aceite de oliva. Después, mételo todo a congelar y ve usando los cubitos cuando quieras darle sabor a tus platos.
¿Harto de tener cables repartidos por casa sin saber a qué dispositivos corresponden? Aprovecha los rollos de papel higiénico para guardarlos y catalogarlos. De esa forma no solo reciclarás, sino que también disfrutarás de una casa más organizada y no tendrás que perder tiempo desenredando cables.
Protege las puertas de tu auto de arañazos y abolladuras cortando churros de piscina por la mitad y colocándolos en los puntos clave de las paredes del garaje. Una solución barata y eficaz para quienes tienen que aparcar en espacios reducidos.
Si te cuesta abrir botes y tarros, coloca una goma elástica alrededor de la tapa para que no se te resbale al girarla. ¡De esa forma ahorrarás tiempo y esfuerzo!
Líbrate de la cal acumulada en la alcachofa de la ducha llenando una bolsa con vinagre y atándola alrededor de ella para que haga efecto durante la noche. ¡La acidez del vinagre descompondrá la cal y dejará la alcachofa como los chorros del oro!
Limpia el teclado de forma fácil y cómoda con uno o varios pósits. La parte adhesiva te permitirá atrapar el polvo y las migas que haya entre las teclas. ¡Una forma ingeniosa de aprovechar las notas que tengas por casa!
Saca brillo a tus deportivas limpiándolas con un poco de pasta de dientes. Este truco viene de maravilla, sobre todo para las partes de goma. Aplica la pasta de dientes, frótala con un cepillo y después retírala con un paño. Una forma sencilla y barata de dejar los zapatos como nuevos.
Crea una bolsa de hielo reutilizable con tan solo un estropajo y una bolsa de plástico. Empapa el estropajo en agua, mételo en la bolsa y congélalo. Este absorberá también el agua a medida que el hielo se vaya derritiendo, por lo que es la solución perfecta para las fiambreras y heridas leves.
Si tienes rollos de papel de regalo por casa, guárdalos en tubos largos de cartón para mantenerlos recogidos y ordenados.
Aprovecha el aire caliente del secador de pelo para despegar etiquetas y pegatinas. ¡Tan solo tienes que esperar unos segundos a que el pegamento se derrita y y listo!
Si tienes alguna cubitera vieja por casa, ¡no la tires! Dale una segunda vida como joyero para guardar tus anillos, pendientes y collares. ¡Y lo mejor de todo es que cabe en cualquier cajón!
Si estás harto de que se te enreden los cables, prueba a mantenerlos organizados con clips como los de la imagen. ¡Una solución sencilla, eficaz y sorprendentemente elegante!
Si tienes un zapatero colgante por casa y no sabes qué hacer con él, aprovéchalo para almacenar productos de limpieza. ¡De esa forma lo tendrás todo recogido y a mano!
Transforma una simple banda magnética en tu mejor aliada para organizar los utensilios metálicos como las pinzas, el cortaúñas, las tijeras, etc. ¡De esa manera te será más fácil encontrarlos!
Si sueles perder varios minutos al día buscando el control remoto por el salón, lo mejor que puedes hacer es pegarle un trozo de velcro por detrás y después poner otro al lado del sofá o de la televisión para dejarlo en su sitio y tenerlo siempre a la vista.
La próxima vez que compres cereales, ¡no tires la caja! Recórtala y decórala de la forma que más te guste para crear un revistero estiloso con el que mantener la casa y tus lecturas organizadas.
Fuentes: (DIYnCrafts)
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