▲Este tipo de turismo está en aumento porque la gente lo ve como una aventura más que vivir desde el agua; una posibilidad de acercarse a varios países de una sola vez pero sin prisa.

▲Las estadísticas muestran que dicha industria ha cargado con 27.2 millones de pasajeros en lo que llevamos de año 2018. Aunque todo el mundo está interesado en el lujo y el ocio que permiten estos barcos, nadie conoce a fondo su impacto medioambiental.

▲Los científicos han llegado a un acuerdo en el que se confirma el cambio climático, que implica contaminación de industrias, coches, combustibles en general... ¿Pero y los cruceros?

▲La mayoría de las personas no se creen que los cruceros sean la causa mayor de contaminación en aire y mar.

▲De acuerdo con Global Citizen, los informes señalan que estas grandes embarcaciones contaminan tanto como un millón de coches al día.

▲Esta se debe al combustible que utilizan para navegar sin cesar.

▲Sus motores queman 150 toneladas de fuel cada día, como muestra el Global Citizen. De ahí, el humo va para el aire...

▲Ese humo contaminado está formado por sulfuro de dióxido y óxido nítrico, dos componentes que encontramos también en la lluvia ácida y que dañan profundamente la vida del océano.

▲No sólo los cruceros contaminan el aire, claro, sino también el océano en gran nivel por los restos que dejan directamente al agua.

▲Según la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos, un crucero con 3.000 pasajeros y tripulación produce a la semana unos 794.850 litros de residuos, 3.785 millones de litros de aguas grises, 95.000 litros de agua de sentina y 568 litros de residuos peligrosos, además de 8 toneladas de desechos sólidos.

▲Las mismas estadísticas de la página web confirma que llegan a contaminar el 77% de la marina global.

▲Un estudio llevado a cabo por Friends of the Earth, una organización medioambiental, se cree que un crucero puede verter al océano (cada año) 1000 millones de residuos de todo tipo.

▲Los patógenos y las bacterias presentes en las heces humanas como la E. Coli, hepatitis, salmonella u otras, pueden contaminar el marisco que comemos y el agua en el que nos bañamos.

▲Es otro de los problemas asociados a las aguas residuales que contienen altos niveles de fósforo y nitrógeno. ¿El resultado? Crecimiento indiscriminado de algas que resta oxígeno al agua y sofoca a su fauna.

▲Por desgracia, se trata de un problema sin regulación estricta todavía, por eso los cruceros pueden echar sus restos durante km sin preocuparse demasiado. Todo lo que hay en el océano, aparece más tarde en las orillas.

▲De acuerdo con The Guardian, incluso si un crucero trata sus residuos antes de verterlos al agua, esta puede verse dañada igualmente. ¡Es un gran problema para todos!

▲La Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos ya anunció en 2009 que los medios existentes y las regulaciones impuestas a tales efectos no estaban siendo suficientes para limpiar el agua de estos gigantes.

▲Es otro de los problemas que conllevan el turismo de cruceros masivo. Estas aguas residuales se contienen en tanques al fondo del barco y sirven para estabilizarlo mientras navega.

▲Los barcos cargan sus tanques en un puerto y después los vacían en el agua en el siguiente. Esta práctica puede introducir especies invasoras de una región a otra como plantas, animales, virus o bacterias.

▲Es la que más contamina de todas, se almacena al fondo del barco y contiene fuel. Estos gigantes la necesitan y descargan cuando están amarrados, aunque no siempre.

▲Según The Guardian, la cadena de cruceros Princess pagó en 2016 40 millones de dólares por vertidos ilegales al océano. Pero no fueron los únicos, hubo más...

▲El daño que causan estos barcos al medioambiente es desesperanzador, aunque hay algunos que ya están intentando mejorar su huella de carbono y reducir el impacto que tienen sobre la naturaleza.

▲Los cruceros sólo de ida pueden reducir su impacto con esta medida. En lugar de utilizar su fuel para tener electricidad, pueden cargarla desde las plantas base que hay en los puertos.

▲Por desgracia, la infraestructura de este tipo de plantas con energía no es muy amplia. Los cruceros deberían invertir más para construir otras.

▲Los combustibles biodegradables podrían utilizarse para reducir el impacto negativo que los otros dejan y arrastran por el mar.

▲Son específicos, pero existen y se ajustan más a los niveles estrictos de emisiones. Reducen las emisiones de dióxido de carbono y producen gases de escape más limpios.

▲De acuerdo con Renewable Energy World, un crucero puede producir hasta 7 toneladas al día. Podrían aprovechar mejor la comida, esperar a verter los restos en puerto y hacer muchas otras cosas antes de dejarlo todo en el océano. ¿No te parece?

▲Todos los tipos de residuos que producen los cruceros dañan el entorno natural, está claro. Muchas líneas de estos gigantes se han comprometido ya a utilizar sistemas avanzados de purificación y tomar medidas contra ello.

▲Afortunadamente, los cruceros se están modernizando poco a poco para ofrecer alternativas más verdes (respetuosas con el medioambiente). ¡Como debe ser! Piénsatelo bien y elige tu barco sostenible para viajar.

¡Atención! Así destroza un crucero el medioambiente

Tendemos a ver la parte bonita de los barcos enormes que nos llevan por el mundo... ¡Pero no es el paraíso!

16/08/24 por StarsInsider

VIAJES Daño

Los cruceros se han hecho cada vez más populares para viajar por todo el mundo. Sus lujos y ofertas de ocio conquistan a los más jóvenes y los más maduritos tanto para vivir aventuras como para relajarse profundamente. Sin embargo, no vemos la otra cara de la moneda: el coste medioambiental que implica contaminación. Dicho coste, por cierto, se vio claramente reducido durante la pandemia.
¡Haz clic en las imágenes para ver la cruda realidad de este tipo de turismo!